Es increíble como el mayor sentimiento que podemos contener en nosotros mismos, el amor, es a la vez lo que más nos hace alejarnos de lo que en verdad somos.
Asumimos que somos orgullosos, que tenemos un gran ego, que nadie nos va a pisotear, pero cuando de verdad sentimos algo por una persona, acabamos dejando de lado todos nuestros ideales y creencias de vida para caer, una vez más en lo que nunca haríamos.
Y es que todos y cada uno de nosotros en algún momento, prometimos no llamar más, no ser los primeros en hablar, no perdonar a la primera de cambio, no pasar ni una más por alto. No ir al bar donde estaba, no mirar sus fotos, ser felices aún estando solos... Y qué paso? Que no sólo llamamos, sino que llamamos para quedar! para quedar en ese bar en que estaba, para quedar y perdonar a la primera de cambio! Para una vez más pasarlo por alto, y porque, al fin y al cabo, cuando sientes algo te cambias hasta a ti mismo si hace falta, con tal de no perder ni un minuto más...
No hay comentarios:
Publicar un comentario